En la Región de Atacama, el 87% de los predios de producción frutícola cuenta con sistema de riego tecnificado, siendo el porcentaje de cobertura más elevado del país. No obstante, las empresas agrícolas del Valle de Copiapó presentan una brecha importante en la eficiencia de sus sistemas de riego dado que la eficiencia actual alcanza en promedio el 46%, lo cual es bajo considerando que con el riego tecnificado se busca alcanzar eficiencias de aplicación de agua del orden del 80 a 90%.

Es en este contexto y con el objetivo de superar esta brecha que el Gobierno de Chile, a través del programas Becas de Capital Humano de Corfo, capacitó a 41 trabajadores agrícola como operadores de riego tecnificado.

El curso tuvo como objetivo generar capacidades y competencias en el capital humano del sector agrícola de la Provincia de Copiapó para la optimización en la operación, mantención y control de equipos de riego, promoviendo la maximización de la eficiencia de esta labor, considerando la situación de escasez hídrica de la zona. El programa se realizó en tres cursos distribuidos a lo largo del valle de Copiapó, en los sectores de Las Juntas, Nantoco y San Pedro. Tras 80 horas cronológicas de capacitación en una modalidad teórico-práctica, 41 trabajadores agrícolas pudieron certificarse como operadores de riego tecnificado.

El seremi de Economía, Manuel Nanjarí, dijo que "las consecuencias positivas de esta iniciativa se traducirán, primero en poder dotar a los trabajadores de herramientas, capacidades y competencias para que puedan desempeñar de mejor forma sus labores y con esto mejorar la producción y uso eficiente del recurso hídrico, segundo, tendrá un gran impacto en la competitividad de las empresas, mediante la disminución de costos por el uso eficiente de fertilizantes y reducción del consumo de energía, junto con la correcta operación de los equipos de riego".

Mientras que la directora regional de Corfo, Silvia Zuleta, señaló que "apuntamos a no depender sólo de la minería y a ampliar nuestra matriz productiva regional".

Redacción

E l Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA) Intihuasi del Ministerio de Agricultura, realizó un nuevo Día de Campo en la localidad de Huasco. Una jornada desarrollada con pequeños agricultores, en el marco del Proyecto "Aplicación de Sistemas de Detección Temprana y Control de Bajo Impacto Ambiental de Plagas y Enfermedades en Cultivos de Hortalizas para la Obtención de Productos Saludables", financiado por el Gobierno Regional de Atacama.

Edgardo Díaz director regional de INIA Intihuasi señaló que "mediante un trabajo sistemático realizado por nuestros especialista de INIA hemos logrado acercar la ciencia a los agricultores de Atacama, quienes han desarrollado el manejo integrado de sus plagas, y con esto, avances significativos en la sustentabilidad de su producción agrícola, estas acciones contribuyen firmemente a los propósitos de nuestro Ministerio de Agricultura modernizando y mejorando sus procesos productivos, generando una agricultura más eficiente, pero también más amigable con el ambiente y con la salud de las personas, es un trabajo conjunto que hoy rinde excelentes frutos".

Durante el Día de Campo, se dieron a conocer los resultados de la Unidad Demostrativa: producción de tomates con baja carga de plaguicidas, ejecutada por INIA. Además se realizó la liberación de enemigos naturales para el control de plagas asociadas al cultivo de tomate bajo invernadero.

Intervención

Andrea Cisternas, Agricultora del Proyecto liderado por INIA, y cuyo campo se encuentra ubicado en Huasco Bajo, sostuvo que "el trabajo investigativo que está haciendo el INIA nos ha servido bastante, el tema de bajo impacto de plaguicidas. La liberación de insectos que se está realizando en nuestro invernadero ha sido bastante productivo y también en el tema económico nos ha servido mucho por el bajo impacto de producto que debemos aplicar. Nos hemos dado cuenta que hemos bajado la aplicación en un 90 - 95% aportando así a nuestra economía".

Por su parte, Claudio Salas, entomólogo de INIA Intihuasi explicó que "es de gran importancia para la producción de hortalizas de la Región de Atacama, dar a conocer la existencia de alternativas biológicas para el control de plagas tan importantes como lo es la mosquita blanca. El insecto que liberamos en la actividad, la chinche depredadora Tupiocoris cucurbitaceus, se comercializa en nuestro país por las empresas Xilema y Biobichos, pudiendo ser adquirido por cualquier agricultor que así lo requiera. Se busca con este tipo de actividades incentivar a los agricultores a implementar estrategias no químicas, pero no por esto menos eficientes en el control de especies plagas".

En tanto, la Secretaria Regional Ministerial de Agricultura (S) Mei Maggi Achu explicó que "el control de la mosquita blanca en el tomate y otras hortalizas es clave para mejorar la productividad y, de acuerdo a la agricultura moderna, el control biológico es relevante ya que disminuye la carga de plaguicidas que se utilizan en el campo, asegurando de esta manera productos más inocuos y amigables con el medio ambiente. Así avanzamos en el compromiso del Gobierno del Presidente Sebastián Piñera al promover la producción de alimentos orgánicos".

El proyecto ejecutado por INIA Intihuasi busca incorporar en la producción de lechugas, tomates y ají medidas y tecnologías para obtener un manejo integrado de plagas y enfermedades, que puedan asegurar la inocuidad alimentaria y de este modo permitan aumentar la productividad, previniendo y reduciendo la contaminación generada por la aplicación de plaguicidas con elevado impacto ambiental, promoviendo para esto, estrategias de manejo no químicas, como lo es el control biológico.

Por su parte, Eliseo Vivanco técnico Prodesal de Huasco destacó la importancia de realizar el trabajo en terreno llevado a cabo por los profesionales de INIA ya que incentiva a los agricultores a replicar lo aprendido, en sus propios huertos, "estamos intentando de que ellos puedan ir hacia prácticas más sustentables de control de plagas y poder contar con esta Unidad Experimental de INIA, permite de forma práctica que los agricultores conozcan las estrategias de mitigación de plagas de tipo sustentable".

Esta iniciativa busca reactivar y diferenciar la horticultura de la Región de Atacama con miras a la obtención de productos primores, libres de residuos, sustentando la diferenciación productiva a través de la capacitación y certificación mediante la entrega de sellos "Bajo en Plaguicidas" por parte de INIA Intihuasi.

6 plagas bajo control oficial tiene el Servicio Agrícola Ganadero (SAG) en Chile. Estas están priorizadas en función de su impacto económico directo.

90 a 95% ha disminuido la aplicación de plaguicidas con la aplicación de los depredadores naturales en algunos huertos.